¡La fiebre está alta!

Días pasados he estado de vacaciones (mentales), por Andalucía, Italia, el Perú y un recorrido exuberante por mis sueños… de hecho ahora estoy en El Mundial y ya sé quien ganará, pero no diré. ¿Cómo lo hago? Ah, secretos milenarios.
Sorbo mate acompañado con emparedado a lo “mano de Dios”, un pan cortado en forma de mano con una pelota al centro, y mientras, me pego una banderita en el cachete, cuál creen?, albiceleste porque somos americanos. Voy practicando la samba, el mejor baile del mundo como ejercicio rápido, pues de tango sólo sé escucharlo. Me he disfrutado a “cosita” de portera en Despierta América por Univisión, el canal que fabrica más latas en mi isla, pero que bueno que existe, porque sin él los partidos sabrían a cosa rara.
Ahí los dejo, que ya me puse los ojos de lince. ¡Que gane el mejor, el de los golazos, che!