Pesimismo?

"I feel that we too often focus on the negative aspects of life, on what is bad. If we were more willing to see the good and the beautiful things that surround us, we would be able to transform... to bring peace and love to our world, which hungers so much for these things."
Madre Teresa de Calcuta

Indudablemente, ella tenía toda la razón, pero como obviar lo negativo del mundo, cuando el mundo se hace pedazos y la desesperanza nos atrapa en cerco.
Así sienten miles de puertorriqueños en la actualidad, con respecto a la situación económica, política y social en nuestra isla. Muchos quisieran irse al cine , al mall a gastar, o de vacaciones, con tal de mirar a un lado y olvidar, pero si son pobres o pobres trabajadores, simplemente no pueden, o al menos no podrán gastar a manos rotas y endeudarse como antes, para mantener un status de vida, ni dejar de ver la criminalidad y problemas sociales en la isla, situación que para mi es la mas triste de todas.

En PR ha ido creciendo una sensación de malestar y pesimismo, ante todo lo que vivimos, y eso es mal augurio, muy malo (negativo mas negativo = positivo?), como comentan psicólogos y trabajadores sociales, tras una encuesta del diario El Nuevo Día, cuyos resultados dan fe del pesimismo colectivo.

Cito:
“ante la escasez de servicios de prevención de enfermedades mentales el sentimiento de pesimismo colectivo podría provocar una crisis y un aumento en los casos de violencia doméstica o maltrato de menores.
De esa forma se expresaron la presidenta de la Asociación de Trabajadores Sociales, Doris González, y el presidente de la Universidad Carlos Albizu, Salvador Santiago Negrón, quienes analizaron para El Nuevo Día, los resultados de la encuesta publicada ayer y sus implicaciones en la población.”

Puedo escribir sin fin de aspectos negativos de nuestra sociedad sin problema, pues critico y reconozco lo malo de los míos sin traumas, ni ceguera, pero por más pesimistas y rabiosos que estemos, es emergente fijar nuestros pensamientos en lo grandioso que es simplemente poder estar vivos, tener que comer, poder decir a alguien que lo aprecias o amas y si no lo tienes, decirlo a ti mismo, pq el pesimismo, solo nos lleva al camino de la autodestrucción y abandono de la fe, no la fe religiosa , si no esa fe silente que necesita el ser humano para aferrarse a la vida.
Es emergente la paz del pensamiento.

Si perdemos la fe en la vida misma, ante la desesperación materialista, parecería un genocidio vestido de fiesta y bailando reggeaton, creando el ambiente propicio para la expectativa de algunos de que nuestra población y cultura caribeña, baje la cadena por sí misma.
Entonces, al nosotros naufragar, los sedientos de poder que desprecian lo nuestro mientras fingen, serian los únicos ganadores.
Bien dice el refrán que a mar revuelto, ganancia de pescadores.
Estos entes, vampiros de energía, basan su ganancia en separar y motivar choques, mientras los bandos se enfrentan hasta acabar unos con otros, y ellos sonríen esperando el momento de gloria, ser los únicos sobrevivientes, los dueños de lo que quede.

Es el momento de unirnos, no bajo ideales políticos, ni religiosos y menos sectarios, ( de paso, me asquean las sectas, lavadas de coco y el fanatismo, con todo respeto y derechos reservados!), si no como humanos, bajo el deseo de sobrevivir como pueblo y salvarnos unos a otros, en este momento difícil.
A fin de cuentas, la vida y el respeto por los demás, siempre valdrá más que el dinero y el consumismo, aunque de pronto no lo veamos.

©AnA 2005